Hoy aquí descargo mis letras
de luchas ganadas y otras perdidas
de retos completados y otros vacíos
llenos de dudas, tristezas y remordimientos.
¿Cuál es el sentido de esta vida?
Complacer... ¿a nuestra familia?
¿a nuestro prójimo?
¿a Dios?
El ser humano no es una isla y no está hecho para estar solo en este mundo.
La sociedad es precisamente eso, la capacidad del ser humano de socializar, mezclarse y actuar en conjunto. ¿Porqué entonces se puede sentir el hombre solo, desamparado, vacío a pesar de estar rodeado de una diversidad de otros seres humanos, ideas y belleza?
Quien escribe estas líneas se plantea esas preguntas, esos contratiempos de la mente que no tenga una idea clara de porqué lo hace, pero este medio resulta indispensable para poder desahogar esos sentimientos encontrados de éxtasis y rabia, de felicidad y angustia, de agridulce sabor, de mediana realización. ¿Qué debe hacer el hombre que se encuentra en esta encrucijada?
¿Es acaso esto un "cruce de caminos" en donde el resto de su vida dependerá del trayecto a recorrer, en lugar de basarse en el camino ya recorrido y lleno de escollos y tropiezos?
Creí y también perdí la fé en las cosas que creía. En el amor, en la religión, en la justicia, en el progreso, en el trabajo, en la amistad, en la vida.
¿Qué resta entonces?
¿Estoy acaso en el fondo del barril? ¿Qué esperanza dilatada puede tener en su futuro y cuya única respuesta yace en la solución a una simple pregunta que ha eludido a los más grandes eruditos desde tiempos inmemoriables, tan antiguos como legendarios: Porqué estoy aquí?
